LÁGRIMA OCULTA
A paso lento recorro el diapasón de mi guitarra y acaricio sus cuerdas vibradoras, en esta tarde gris que apetece una lágrima oculta, guardada en algún oscuro rincón para el momento
A paso lento derrama la seguiriya gitana su recóndito sino, su suerte fatal y su pena sin remedio.
¡Qué emoción de hondura en cada acorde! ¡Qué suspirar brillante en tus arpegios! ¡Qué caprichosa armonía nos regalas! Y ¡Qué compás agazapado en el vaivén de las caderas de tu cuerpo!
Prisionera de la noche, te sacrificas en un agónico rasgueo, donde el gitano se rompe la camisa y abre sus ojos esparpitaos de pánico y misterio.
A paso lento las tinieblas van creando sus espectros y aparecen nuevas melodías, nacidas de gritos ancestrales y lágrimas ocultas que llora la guitarra y encuentra su consuelo,
A paso lento
recorro el diapasón de mi guitarra y acaricio sus cuerdas vibradoras, en esta
tarde gris que apetece una lágrima oculta, guardada en algún rincón para este
instante.
A paso lento
derrama la seguiriya gitana su recóndito sino, su suerte fatal y su pena sin
remedio.
¡Qué emoción
de hondura en cada acorde! ¡Qué suspirar brillante en tus arpegios! ¡Qué
caprichosa armonía nos regalas! Y ¡Qué compás agazapado en el vaivén de las
caderas de tu cuerpo!
Prisionera
de la noche, te sacrificas en un agónico rasgueo, donde el gitano se rompe la
camisa y abre sus ojos esparpitaos de pánico y misterio.
A paso lento
las tinieblas van creando sus espectros y aparecen nuevas melodías, nacidas de gritos ancestrales
y lágrimas ocultas que llora la guitarra y encuentra su consuelo.